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Por: Librado Velo Amparán

EL CAMPEONATO NACIONAL Y LO QUE SIGUE

Este próximo domingo 28 de Noviembre, en Baja California Sur, inicia la participación de Chihuahua en el campeonato nacional de beisbol de primera fuerza. Fecha inédita, por cierto; nunca se había programado tan tarde la celebración de este torneo, tan tradicional como venido a menos, que lo demuestra la magra participación: solamente 9 entidades federativas (el anfitrión competirá con dos selecciones para completar la decena de equipos). Puede atribuirse la ausencia de al menos otras 6 entidades a que estamos todavía en tiempos de la pandemia, aunque también es obvio que hay otras razones, como sin duda lo es el que no hay mayor incentivo que participar para cumplir, dado que desde hace años ya no es selectivo para integrar el equipo mexicano en competencias internacionales.

Chihuahua acude con un equipo fuerte (como casi siempre), favorito unánime al cetro, ya que por los rosters que han publicado, no parece que los tradicionales rivales como Nuevo León, Baja California, Sonora o Sinaloa, vayan a poner en riesgo al conjunto de nuestro estado, aunque a diferencia de otros años, ni siquiera entrenaron previo a su salida. Pero van confiados en la calidad de los seleccionados, y en que están activos en las ligas otoñales donde están todos participando, por lo que se sabe. Otra cosa es ya si sirve de algo ganar un torneo tan desairado, lo mismo que pasó con el “nacional” sub 18, donde solamente cuatro (¡4!) entidades federativas más el anfitrión, disputaron un campeonato muy deslucido (por cierto, ninguna culpa tuvieron de eso los jóvenes deportistas chihuahuenses, que ganaron con facilidad gracias a su empeño y calidad).

Lo que sigue, me parece que es mucho más importante para el beisbol de nuestra entidad, como lo es el nombramiento del nuevo presidente de la Asociación Estatal y su brazo operativo, la Liga Estatal, así como de los jurisdiccionales de las diez zonas que abarcan el territorio de Chihuahua. Seguramente en la segunda semana de Diciembre saldrá humo blanco, no se sabe si por designación directa o vayan a intentar otro método de elección; hay varios candidatos que se manejan, incluyendo al actual mandamás, Francisco Javier Fierro. Solamente que ahorita todo son especulaciones y lo que hay que recalcar es que es un momento decisivo en la historia del beisbol estatal: o se continúa con el esquema actual, mantenido en los últimos 10 años, más o menos, o se da un viraje para corregir el rumbo y los objetivos, que siempre debieran ser los originales, es decir, el desarrollo del beisbol en Chihuahua, por medio de elevar el nivel de los niños y jóvenes, mantener y mejorar la infraestructura (estadios, unidades deportivas, etc.) a través del manejo prudente y honesto de los recursos que el propio beisbol genera.

No estoy muy seguro si las nuevas autoridades del Instituto Chihuahuense del Deporte estén conscientes de la importancia que tiene el beisbol en la entidad, aunque ya fueron “placeados” durante la celebración de la final del Estatal 2021 y en el transcurso del malogrado y ya mencionado nacional sub 18 y se les vio muy contentos y hasta un poco sorprendidos. Pero no cabe duda que viene un momento trascendental y esperemos que estén a la altura de las circunstancias, porque nada más hay que imaginar que si se designa un dirigente o dirigentes, probablemente sea para los próximos seis años, si se escoge burocráticamente, que es lo que parece que va a suceder. Ya comentaremos…

Usted tiene la mejor opinión.

Hasta la próxima.